La mayoría de las veces por no afirmar que prácticamente siempre, cuando se esta en un negocio lo principal y más importante es hacerlo crecer y llegar a los objetivos. Como empresas nos preocupamos por atraer al mejor talento disponible, invertimos tiempo, dinero y esfuerzo en este proceso con la finalidad y la certeza de que formando equipos con personal altamente capacitado alcanzaremos nuestros objetivos estratégicos.
Una vez que hemos seleccionado a nuestras o nuestros candidatos ideales pedimos al área de atracción de talento prepare un proceso de Onboarding impecable en el que nos aseguramos de que el nuevo colaborador conozca perfectamente la misión, visión y valores con los que como compañía predicamos. Los capacitamos y monitoreamos constantemente su desempeño buscando asegurar que todo lo que nos contó sobre su experiencia sea cierto y comience a materializarlo en beneficios y ganancias para el negocio.
¿Cuál es la importancia de las emociones de nuestros colaboradores?
Lo que normalmente no hacemos, es preocuparnos por conocer a la persona detrás del rol. ¿Quién es en realidad mi colaborador?, ¿Qué le motiva?, ¿Qué le preocupa?, ¿Cómo ha reaccionado a lo largo de su vida ante la adversidad?, ¿Qué le enoja?, ¿Qué les estresa?, ¿Qué lo saca de su centro? Quizás de pronto puedas preguntarte, ¿Saber eso en qué le beneficia a mi negocio? O quizás seas de aquellos que piensan que la vida laboral es un punto y aparte de la vida personal, pero la realidad es otra.
Actualmente, no se da la importancia que se merece a la inteligencia emocional; la mayoría de nuestras decisiones, están dominadas por las emociones. Los impulsos de emociones y sentimientos deben ser guiados, orientados, controlados y expresados mediante una sana inteligencia emocional.
Aquí algunos datos sobre una sana inteligencia emocional en el mundo laboral:
- El mundo actual ha demostrado que las personas exitosas no se caracterizan por su inteligencia racional o coeficiente intelectual. Por el contrario, los rasgos más comunes entre los colaboradores, líderes o gerentes exitosos son sus habilidades personales.
- En el siglo XXI, la inteligencia emocional es una capacidad indispensable para que el ser humano sea consciente de sus emociones y las de las otras personas con las que convive.
- La inteligencia emocional se puede formar cuando la persona es consciente de que la posee y de que necesita enfocarse en sus fortalezas y en sus áreas de oportunidad para establecer planes de mejora, con acciones concretas de desarrollo de sus emociones para que, con base en ello, sea apto para conducirse de una manera apropiada consigo mismo, con las otras personas al relacionarse con ellas y así, en conjunto, contribuir al logro de objetivos de bienestar propio y común no solo en su entorno personal si no también en el profesional.
¿Cómo trabajan los pensamientos y emociones de nuestros colaboradores?
Desde hace muchos años se ha tenido en cuenta que el ser humano es poseedor de dos mentes: una que piensa y otra que siente, por decirlo de alguna manera “la del cerebro” y “la del corazón”. Estas dos mentes se interrelacionan y trabajan en equipo.
- La primera de ellas es la mente racional, pensante, capaz de ponderar y de reflexionar.
- Mientras que el otro tipo de conocimiento es impulsivo, creativo y poderoso, es la mente emocional y a pesar de que en ocasiones nos dejamos llevar por los impulsos más irracionales, estos impulsos emocionales pueden ser controlados para conseguir el éxito si utilizamos inteligentemente estas emociones.
De aquí la importancia y necesidad como empresa de formar, educar y desarrollar las competencias emocionales.
Los colaboradores con altos niveles de inteligencia emocional son capaces de entender, motivar y ayudar a sus compañeros, fortalecer las relaciones laborales, conocer las necesidades, fomentar la productividad, aprender de los errores, manejar el estrés laboral y resolver conflictos entre colegas, proveedores y clientes.
Sabiendo esto, es inminente darse a la tarea de trabajar en desarrollar esta valiosa competencia en cada uno de tus colaboradores. No permitas que el tiempo en procesos dentro de tu área de gestión de recursos humanos te aleje del logro de una de las claves para hacer crecer tu negocio y conoce las múltiples alternativas que SAP Success Factors tiene para ti.